domingo, 20 de junio de 2021

LA VIVIENDA. ENSAYO NUEVA CONSTITUCION CAPITULO 5

 


LA VIVIENDA. ENSAYO NUEVA CONSTITUCION CAPITULO 5

La vivienda en Chile

Según las últimas estadísticas 1 de cada 3 chilenos no tienen casa propia, es decir casi 7 millones no tienen hogar o un sitio propio. Mientras hay personas que poseen cientos de miles y millones de hectáreas en forma particular, ya sea compradas o por derechos muy antiguos, el estado ni la constitución solucionan este problema. Respetando el derecho a propiedad, donde no hay límites y una país de libre comercio, estamos indudablemente muy atrasados o muy desinteresados en velar por los chilenos que no tienen voz ni voto en las decisiones de los poderes. Tampoco se debe expropiar propiedades o fomentar un sistema que no permita el auge individual o el esfuerzo personal. Pero se deben establecer límites de un mínimo y de un máximo de derechos y pertenencias que garanticen una sociedad  justa, humana y solidaria. Por eso propongo y se debería hacer dotar de un terreno a cada familia chilena que no tenga, entendiendo como familia a una pareja con hijo o hijos, (inclusive para los solitarios y parejas debería existir esa opción). Para asegurar su pertenencia, también se deben establecer leyes para que no sean vendidas, o para las disoluciones familiares. Así se deben implementar poblaciones, pueblos, planos con sus respectivos servicios, agua potable, alcantarillado, caminos, accesos y electricidad, muy cerca de los centros de productividad, ciudades, y proyectos. Sobre la construcción, se ha demostrado a través de la historia, que cada familia es capaz de construir sus viviendas, pero también cabe la posibilidad de que la empresa privada y estado ayuden, subsidien, financien o sean descontados sin intereses a través del tiempo, suponiendo que las familias tengan todas las opciones, también retomar las viejas costumbres de incluir, canchas, parques, anfiteatros, zonas de esparcimiento, escuelas, hospitales, gobiernos y centros comerciales, cada cierta cantidad de superficie, y volver a tener las medidas que hagan más cómodas para los estacionamientos, tránsitos, etc,…

En ciertos países dan mucho terreno a sus ciudadanos, con el compromiso de hacerlos producir, de lo contrario se lo dan a otros con más emprendimiento. De igual forma los terratenientes actuales en Chile deberían hacer lo mismo, implementar la producción, el uso de sus millones de hectáreas, eso sí, con los cuidados eco ambientales necesarios. Otras leyes y prácticas es destinar áreas para parques, turismo, camping, producción agrícola, ganadería, acuicultura, viviendas particulares, sociales, etc,..

Particularmente hablando, según las estadísticas, cambios climáticos y proyecciones integrales económicas, de subsistencia, deberíamos aprovechar las zonas desértica y en vías de desertificación, y desarrollar proyectos agropecuarios, acuícolas, etc…,  que nos permitan ser la bodega alimentaria del futuro, con tecnologías como la desalinización, la condensación por aire, grandes viveros construidos con materiales reciclados y con redes de trasportes eléctricos con energía eólica y solares que mantengan la comunicación con las grandes ciudades, mercados y puertos. Así me imagino una familia completa que trabaje en su granja o parcela en el desierto o en cualquier punto del país, si sumamos, al sistema educativo, universitario e industrial, tendríamos entonces, familias con su vivienda y su método de subsistencia e independencia comercial, que aportarán a la economía y al nivel de vida de los más desposeídos o los que quieran.

Si consideramos los campamentos, los allegados, los que no tienen como arrendar, los que viven en las calles, o las familias superpobladas (donde viven muchos en la misma casa), todo eso se solucionaría, solo con el hecho de darle un terreno donde puedan construir.

La cantidad de viviendas sociales construidas no dan abasto. Las familias se multiplican. Los campamentos de desocupan y llegan habitantes nuevos. Otra problemática es la llegada de millones de extranjeros, que viven en campamentos, por su mano de obra barata, por las leyes que hace el poder económico han provocado muchos problemas sociales que han gatillado la furia de muchos connacionales, maestros de construcción, asesoras de aseo, sector minero, agroindustrial, etc,..Los poderes no cuidan los empleos ni les interesa el resto de los chilenos, tampoco a la mayoría de los políticos, solo su aporte económico que va a sus bolsillos. Mientras el resto de los países en américa es celosísimo en el cuidado de sus empleos y ciudadanos, Chile se ha convertido en el paraíso del continente americano, en desmedro de los chilenos más desposeídos. Este gran problema, puede convertirse en una oportunidad, como muchos lo han hecho ya. El arriendo, el estado, y las entidades financieras pueden dotar de subsidios o préstamos sin intereses para que los chilenos más desposeídos puedan construir piezas para arrendar, obviamente debe ir acompañado de leyes que favorezcan a todas las partes.

La construcción de tomas, campamentos debe ser regularizados en principio,  mientras se den los terrenos para los chilenos o se hagan piezas para arriendo para los extranjeros. Pero si el  fondo de emergencia se transformara ya perpetuamente para los chilenos en un sueldo vitalicio como corresponde al dueño del país de su producción, impuestos, etc,..que es cada chileno, entonces todo es más relajado. Debe regularizarse la construcción de campamentos, especialmente porque son construidos en zonas aluvionales, peligrosas, sin acceso a los equipos de emergencia y sin la separación o cortinas de antifuego, tampoco poseen las instalaciones seguras de electricidad o gas, ni nombre de pasajes o números de vivienda. El campamento es un campamento, pero si queremos realmente solucionar a corto plazo o mediano plazo, los campamentos deberían desaparecer tornándose en poblaciones bien construidas y en zonas aptas.

Como conclusión, es triste saber que las grandes empresas, pagan la nada misma por explotar millones de hectáreas, o privados que mantienen millones de hectáreas sin ningún uso, que millones de hectáreas pertenecientes al estado no las use nadie, y que cada administración que ha pasado no haya hecho nada, cero aporte para Chile, solo para sus bolsillos, los que nos convierte en un país pobre con muchas desigualdades, injusto y muy subdesarrollado. Pienso que una vez no tuve hogar propio, arrendando, sin tierra, viviendo en una toma, la misma sensación que hoy tienen 7 millones de chilenos, humanos tal como usted, que sufren, ríen, viven, que respiran el mismo aire y que son dueños de Chile, pero solo en el papel, hagamos realidad sus sueños y cambiemos su vida, tal como usted y yo lo hicimos en algún momento de nuestra historia.

Por antofafenix